Cuando recurres a una tasación inmuebles en Madrid, Granada, Cádiz o donde sea, está claro que el criterio del tasador varía enormemente el resultado de una valoración.
De hecho, es raro que coincidan dos valoraciones hechas por diferentes peritos. Sabemos que existe una normativa de valoración que deben de seguir, pero está muy lejos de ser una ciencia exacta.
Es por eso que hay que confiar en que el tasador «acierte» con el criterio al escoger los pisos, casas, chalets o lo que sea con los que quiere comparar para hacer su tasación.
El problema fundamental es que para los que no conocemos el funcionamiento del sector, el que el técnico falle puede suponer la diferencia entre poder vender o no hacerlo. Y es que en mi caso me gasté una pasta para que vinieran a valorar mi piso, porque llevo más de un año sin venderlo.
Vino el tasador, midió la casa, tomó datos y se marchó. A los 5 días, nos pidió que retirásemos la valoración y explicárnosla: Según él, mi piso valía 135.000€ (Yo estaba pidiendo 140.000).
Así que le hicimos caso, y en 135.000 tuvimos algunas visitas, pero sólo una nos hizo una oferta en 120.000€. La rechacé porque estaba bastante por debajo de los que el tasador nos fijo, y de esto hace ya más de 8 meses… Ahora me arrepiento de no haber aceptado la oferta y creo que el valorador se equivocó al alza en su informe, de lo contrario, hubiera salido algo similar a lo que me ofrecieron.
Y es que, pese a ser una sociedad de tasación de ámbito nacional y todo lo que quieras, el problema es que los peritos son arquitectos, pero que en su vida han tenido que vender una casa.
Creo que si tuvieran experiencia en el mercado de compra y venta, además de la formación y titulación, cuando hicieses una tasación en Granada, Cádiz, Madrid o en las Bahamas, los valores serían similares…